La elongación o estiramiento muscular es realizado con mucha frecuencia por los deportistas. Algunos lo realizan previo a la realización del deporte y otros posterior a la finalización del entrenamiento o juego. Existe el concepto en que hay que estirar el músculo ya que después de realizar ejercicio se produciría acortamiento muscular. Pero, ¿esto es así?
La elongación se ha propuesto como un método para prevenir lesiones en los deportistas. Dependiendo del deporte en cuestión, se han ido realizando diversos estudios con diversos protocolos de entrenamiento y como éste influye en la disminución real de lesionarse por parte del deportista. La realidad es que la elongación funciona en deportes que presentan ciclos rápidos de contracción – estiramiento, en donde se necesita una mayor deformidad entre el músculo y el tendón. El tendón se encarga de absorber energía, almacenarla, distribuirla y transformarla, si es necesario, en energía elástica. Esta función permite que los músculos y articulaciones no sufran grandes cargas, disminuyendo las posibilidades de lesionarse por parte del deportista. Esto no ocurre en deportes que no tienen grandes cambios de contracción – estiramiento, como el ciclismo, caminatas, lucha. En este tipo de deporte predomina la contracción concéntrica, necesitando un tendón más firme capaz de transformar rápidamente la energía metabólica en energía elástica y transmitirla hacia las articulaciones. Por ende, la elongación en este tipo de deporte no sería beneficiosa pudiendo aumentar el riesgo de lesión del deportista.
La elongación es más eficiente si se realiza posterior a la realización de ejercicios, especialmente los de gran cambio contracción – estiramiento. El problema es que cuando la persona termina de realizar el ejercicio o deporte quiere descansar. Por lo tanto, al día siguiente sería recomendable realizar series de elongaciones para que la musculatura mantenga su flexibilidad, posibilidad de cambios (deformación) y fuerza, permitiendo la correcta función contráctil. Esto lo ayudará a relajar la musculatura, preparándola para el siguiente entrenamiento.
Es importante asesorarse con un buen profesional respecto a cómo entrenar. Si no lo hace, tiene un mayor riesgo de lesión músculo – esquelética, impidiéndole tener un desarrollo normal y crecimiento deportivo. Por lo tanto, es muy importante saber qué o no hacer desde el calentamiento previo hasta la parte posterior a la finalización del entrenamiento o competencia. Es importante que cuide su cuerpo y lo trabaje de forma correcta, mejorando progresivamente y sin forzarlo, cumpliendo con sus objetivos y disfrutando del mismo. Lesionarse frecuentemente y no saber por qué, no es disfrutar el realizar ejercicio. Consulte con un buen profesional y podrá aumentar su rendimiento, capacidad y fuerza sin lesionarse más.